El tenista kazajo Alxander Bublik protagonizó ayer la imagen de la jornada en la pista rápida de Miami Gardens, donde se disputa el ATP 1000 de Miami, con un extravagante golpeo que podría haber firmado Nick Kyrgios. Bublik, también caracterizado por jugadas inverosímiles, utilizó el mango de la raqueta para golpear la bola durante un partido en el que finalmente cayó derrotado.

El actual número 33 del circuito es uno de los tenistas que más golpes sorprendentes despliega en pista, aunque no goce de la popularidad de jugadores como Gael Monfils o el polémico Kyrgios. En esta  ocasión ha vuelto a convertirse en el protagonista del día tras un gesto que ha sido calificado como genialidad y provocación a partes iguales.

En el encuentro de diceseisavos ante Casper Ruud, en el que acabó cayendo eliminado, el mejor jugador de Kazajistán en activo buscó sorprender al octavo del mundo con un tiro corto con el mango. Lejos de molestar a su rival, el gesto de Bublik -que le sirvió para ganar el punto- provocó una sonrisa en el noruego, quien le felicitó en el cambio de pista. 

Desconocido para muchos, Bublik es uno de los grandes "malabaristas" del circuito y uno de los jugadores que más utiliza el saque por abajo tantas veces intentado por Kyrgios. No obstante, estas acrobacias son lo único en lo que coinciden el kazajo y el australiano, pues Alexander no acostumbra a protagonizar salidas de tono y conductas antideportivas en pista como el de Camberra.